Recientemente, diferentes expertos han podido corroborar que un tratamiento intensivo para la cura de la periodontitis es capaz de:

  • Reducir los niveles de presión sanguínea
  • Inhibir la inflamación
  • Aumentar de forma notable el progreso de la función endotelial

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la hipertensión arterial es la primera causa de mortalidad global. Esta patología se define por poseer cifras de presión sanguíneas superiores a 140/90 mmHg. El 75% de las personas con dicho problema tiene una gran probabilidad de desarrollar problemas como infarto de miocardio, ictus o enfermedades renales. Para hacernos una idea, cerca de 1.100 millones de personas son propensas a sufrir dichas adversidades.

¿Podemos hacer algo para evitarlo?

Lo principal siempre es mantener un estilo de vida saludable. De esta forma evitaremos que se desarrolle dicha hipertensión, además de, obviamente, mejorar otros aspectos de nuestra salud general. Por ejemplo, otras de las grandes beneficiadas, en este caso, serían nuestras encías.

Una investigación llevada a cabo por de la Universidad Sun Yat-Sen en Cantón (China) observa cómo el tratamiento intensivo de la periodontitis o enfermedad de las encías reduce la presión arterial de forma completamente increíble. Los efectos se aprecian especialmente en personas con hipertensión. “Nuestro trabajo demuestra por primera vez que la intervención periodontal intensiva puede por sí sola reducir los niveles de presión sanguínea, inhibir la inflamación y mejorar la función endotelial”, afirmaba orgulloso Jun Tao, director de este estudio.

Especificaciones del tratamiento

La enfermedad de la periodontitis, básicamente, está constituida por la inflamación, además del sangrado de las encías. Esta patología puede llegar a causar verdaderos estragos en nuestra salud bucodental, por ejemplo, la erosión de la masa ósea, que sujeta las piezas dentales y, por tanto, su posterior caída. Además, potencia el desarrollo de otras enfermedades muy perjudiciales para nuestra salud, como la diabetes o diferentes tipos de cáncer.